viernes, 18 de noviembre de 2011

Finlandia protege la educación


Cuando en Finlandia se habla de educación no se refieren a los recortes de profesores que hace la administración pública o los distintos programas educativos que proponen los líderes políticos para su campaña electoral. Allí la educación ocupa su propio espacio inamovible e inalterable de forma que no se convierte en debate de intereses. Muchas veces, cuando pensamos en los problemas de la educación española, lo primero que nos viene a la mente es la escasez de recursos que existe en el país pero, después de haber examinado el sistema educativo más eficiente, vemos que Finlandia tiene menos recursos que nosotros y, en cambio, obtienen mejores resultados académicos. La cuestión del éxito no reside en la cantidad de recursos que un país dispone si no en cómo es capaz de administrarlos de forma eficiente. 

Entonces nos preguntamos ¿cuáles son los factores y características del sistema educativo Finlandés?

Existe una serie de elementos que combinados dan lugar al esplendor del sistema educativo:

-En Finlandia los futuros profesores de colegios e institutos reciben una formación exhaustiva y aún así sólo uno de cada diez son seleccionados para ser maestro, sólo alcanzan este puesto aquellos alumnos que más capacitados y motivados estén. Los profesores de Finlandia están socialmente reconocidos por la labor tan importante que ejercen dentro del aula, tanto por los alumnos como los padres.

-La educación y la política son dos temas que nunca se mezclan, la educación no se convierte en una lucha de intereses de los partidos políticos y existe un sólido acuerdo donde queda claro que el sistema educativo ha de mantenerse como algo neutro y alejado de la política para evitar reformas continuas. Los centros educativos y profesores disfrutan de autonomía para ejercer su labor sin ser condicionados, mantienen su libertad y allí se puede apreciar el respeto que la sociedad les brinda.

-El sector educativo busca mantener y cuidar su prestigio a través de unos profesores eficaces y motivados. Los centros educativos conocen lo que pueden exigir de un profesor y si no es satisfactorio lo pueden cambiar por otro, premiando la profesionalidad de éstos. En el sector también existe un compromiso asumido por profesionales, padres y educadores. Todos ellos defienden y promueven los intereses de la educación siempre por el bien de los alumnos, son conscientes que tienen un objetivo común: el aprendizaje de las futuras generaciones.

Podemos concluir que el sistema educativo finlandés está construido sobre la confianza y transparencia. La población confía en los profesores y éstos a su vez en los alumnos. El profesor crea un plan de estudios adaptado para el alumno y mantiene, en todo momento, la motivación de la clase con temas que les resulten interesantes. Por lo tanto, el docente se ve en la obligación de mejorar e innovar su metodología de enseñanza, para cultivar la inquietud y ganas de aprender de los alumnos, usando herramientas actuales como youtube, facebook, twitter, wikipedia... De forma que el aprendizaje del alumno no se base en la memorización si no en potenciar la capacidad de aprender y reflexionar a través de la curiosidad, creatividad y experimentación.

*Escrito por Leandro Huerto 

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