martes, 3 de julio de 2012

Naturaleza: La esperanza del camello majorero se llama Tamonante


Por César-Javier Palacios, de la Fundación Félix Rodríguez de la Fuente (@fundacionfrf)

Se llamaba Teo, pero una rápida campaña en Facebook le ha rebautizado como Tamonante, la mítica sacerdotisa de los aborígenes majoreros, los propios de Fuerteventura. Nació esta semana con buen peso, nada menos que 33 kilos. En una hora y media la cría había conseguido ponerse en pie y una  hora más tarde comenzó a mamar. Tanto su madre Senegal, una de las pocas hembras existentes de camello majorero, como el pequeño macho, se encuentran sanos y felices.


El guelfo, canarismo con que se conoce en Fuerteventura a estas crías, puede verse en el Oasis Park La Lajita, un zoológico propietario de una gran manada de camellos superior a los 600 ejemplares. El equipo veterinario del centro, encabezado por Olga Amann, está feliz con este nuevo nacimiento:
“La madre no es primeriza y se ha portado muy bien. Está muy pendiente del “camellito”, lo olisquea, lo incita a moverse y regularmente lo alimenta. También el padre de la cría y las otras hembras del grupo que estuvieron presentes durante el parto se portaron muy bien”.

La población autóctona de camello de Fuerteventura es la única raza de esta especie que existe en la Unión Europea y se diferencia genéticamente de la africana. En realidad es un dromedario, pues sólo tiene una joroba, pero así se le llamó en Canarias desde que arribaron los primeros ejemplares en el siglo XV.

Antiguamente utilizado como animal de tiro y transporte de mercancías y viajeros, se empleaba habitualmente para arar los campos. A partir de la segunda mitad del siglo pasado, con el desarrollo urbano y turístico y la introducción de maquinaria, los ejemplares de camellos desaparecieron de forma progresiva.

En 2001 tan sólo había localizados e identificados 10 ejemplares de camellos majoreros, ocho hembras y dos machos. Finalmente, el año pasado la Comisión Nacional de Coordinación para la Conservación, Mejora y Fomento de Razas Ganaderas ha reconocido la raza con el nombre más genérico de camello canario, y la ha incluido en el catálogo oficial de España.

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